Llámanos al
943 460 689
La única manera de saberlo, ya que inicialmente no da síntomas es realizando revisiones oftalmológicas periódicas, en las que además de medir la tensión, se realice alguna prueba como la campimetría computerizada o la tomografía de coherencia óptica, que nos aseguren que el nervio óptico del paciente está sano.
Los factores de riesgo asociados al glaucoma escapan un poco a nuestro control, de manera que no podemos influir sobre la tensión ocular en base a cambiar nuestros hábitos de vida, alimentación… La única manera de prevenirlo es la realización de exploraciones oftalmológicas rutinarias.
No. El glaucoma es una enfermedad crónica en la que no podemos administrar un tratamiento puntual y curarla definitivamente, pero si lo podemos controlar para evitar que dañe al ojo.
Los daños que ya existen y la visión ya perdida en el momento del diagnóstico, son irreversibles, pero existen técnicas y tratamientos que permiten a los pacientes aprovechar al máximo las visión que aún conservan.
No. Aunque en la mayoría de los casos la tensión ocular suele estar alta, hay pacientes que con tensiones dentro de la normalidad se les puede dañar el nervio óptico. Por ello es muy importante, además de medir la tensión, realizar alguna otra prueba diagnóstica, que nos asegure que el nervio óptico del paciente está sano.